MEDITACION

MEDITACIÓN

Según estudios realizados en la Universidad de Wisconsin, en los Estados Unidos, trabajando en conjunto con un Monasterio de Nepal, se definió qué se entiende por Meditación. Sobre todo porque es una técnica que engloba varias tradiciones culturales e incluye distintos métodos de concentración, respiraciones, visualizaciones y disposición para realizarla. Estudiaron un grupo de monjes budistas y a otro sin experiencia en estas disciplinas, registrando en ambos una disminución del ritmo cardíaco, de presión arterial y en sus cerebros se pudo ver como los mecanismos antiestrés se ponían en marcha.
Para entender donde y como actúa conviene repasar algo de anatomía y se podrá observar que se trata de un proceso neurofisiológico.
En el hemisferio izquierdo del cerebro hay un predominio de las funciones lógico-matemáticas y secuenciales; mientras que en el derecho rigen el reconocimiento de rostros, la ubicación espacial, la espiritualidad, la creatividad.
“Al meditar se fija la atención del hemisferio izquierdo en la focalización y en ese acto de se libera el funcionamiento del hemisferio derecho, donde se asienta el mundo emocional”
En la Meditación focal; esto es fijar la vista o la atención en algo que atraiga en forma continua, concentrando de esa manera el hemisferio izquierdo.
Disminuye la actividad en los lóbulos parietales, controlando la auto percepción, la orientación y el miedo.
Se activa el lóbulo prefrontal derecho, vinculado con las emociones positivas y el autocontrol.
Entre los métodos de Meditación se puede utilizar la fijación de la vista en la llama de una vela, lo que utilizan los “yoguis” o “Monjes Tibetanos: Pranayama; control de la respiración, un “mantra” como por ejemplo el “ommm”, “ vibraciones con Cuencos”, “mandalas ó imágenes. La perfección en la Meditación se logra cuando no es necesaria ninguna técnica y la mente se aquieta. Pero para llegar a este estado meditativo primeramente hay que ejercitar la mente quitando preocupaciones y pensamientos para llegar al posterior estado espiritual.
Los estudios demuestran que la Meditación es beneficiosa para combatir la ansiedad, depresión, estrés, hipertensión arterial, problemas cardíacos y todas las enfermedades, dado que estas se producen cuando nuestro organismo está en desequilibrio.
La Meditación no puede ser separada del concepto de conciencia, porque implica introspección y reflexión sobre uno mismo.
Los profesionales que practicamos la Meditación, sabemos que meditar es la fuente de salud mental, física y espiritual.
Recordemos que siempre demos respetar y seguir los consejos de nuestro médico, siendo este sistema de sanación un complemento de la medicina y no un sustituto.